Iron Maiden+Gojira+Sabaton - Estadio Wanda Metropolitano. 14/07/18.


Después de haber disfrutado de la descarga de la Doncella en el Firenze Rocks, no podíamos perdernos la fecha que más cerca nos quedaba, así que nos embarcamos para Madrid, única fecha en nuestro país, en el estadio del Atlético de Madrid, el recién estrenado Wanda Metropolitano, un estadio espectacular y bien comunicado, esperando poder colocarnos más cerca de la acción para ver a IRON MAIDEN en todo su esplendor.
Con una entrada cercana al sold out, mas de 50000 almas según la organización, se acompañaron de SABATON y GOJIRA, encargados de caldear la ya de por si elevada temperatura del recinto.
Debido a una pésima organización en la entrada, con una cola kilométrica para acceder a la pista, nos perdimos unos cinco temas de SABATON, una pena ya que dejaron claro su calidad y que van subiendo puestos poco a poco en este océano lleno de tiburones.
Si pudimos constatar la magnífica acústica del recinto, al menos desde nuestra posición, que no es habitual en estadios de futbol, ya que no están pensados para ello.
SABATON fueron los encargados de abrir lo que prometía ser una gran noche y los suecos, como suele ser habitual, no defraudaron.
Ghost División  fue el primer tema y a partir de aquí, la banda liderada por Joakim Broden y Pär Sundström aprovechó el poco tiempo que dispuso para ofrecernos un setlist con la mayoría de sus éxitos.
Swedish Pagans, Carolus Rex  y Night Witches  sonaron contundentes y la gente las disfrutó esperando la parte final donde SABATON dejó para el final sus temas más emblemáticos,
Primo Victoria, Shiroyama  y como remate To Hell and Back.
Una gran actuación demasiado corta para una banda con un futuro muy prometedor.


GOJIRA, la banda francesa de los hermanos Duplantier,  vinieron al Wanda dispuestos a descargar lo mejor de su repertorio.
Su actuación fue muy bien recibida por el público y todos los temas sonaron muy compactos demostrando la calidad de los de Bayona.
L' Enfant Savage, Flying Whales , Silvera  o la última de la noche Vacuity  entre otras, hicieron que los allí presentes disfrutaran a lo grande mientras se preparaban para el plato fuerte de la noche.


Alrededor de las nueve de la noche, empieza a sonar el ya clásico Doctor, Doctor de UFO, que nos avisa que The Legacy of the Beast va a empezar, y al ver asomarse el hinchable del spitfire por detrás de la casi oculta batería de Nicko, el estadio ruge con ganas.



No hay sorpresas en el listado de temas, la teatralidad de esta gira impone un orden estricto para que los golpes de efecto cumplan su cometido.
Como anuncia Bruce en su primer speech con el público, empiezan con un bloque dedicado a la guerra y a la lucha por la libertad, compuesto por  Aces High, Where Eagles Dare, 2 Minutes To Midnight, The Clansman y The Trooper.






A continuación aparece la catedral para dedicar el siguiente bloque a la fe, Revelations, ForThe Greater Good Of God, The Wicker Man, Sign Of The Cross y Flight Of Icarus, con Bruce armado con lanzallamas y la figura gigante de Ícaro, al estilo de la portada del single del mismo nombre.





Momento para los clásicos, por si no habíamos tenido suficientes (¿cuándo lo son?) Fear Of The Dark, The Number Of The Beast y Iron Maiden, da paso al único bis de la noche, The Evil That Men Do, la recuperada  para alegría de todos Hallowed Be Thy Name, tras las acusaciones de plagio y la cabalgada final Run To The Hills, con la banda al completo sonrientes y agradecidos con el publico por su respuesta y agradecidos todos por su dedicación,  la batería sonó con mucho empaque, Dave haciendo que lo difícil parezca fácil, Adrian con su sobriedad y buen gusto de siempre, Janick, al que se le ha dado más tiempo de solos, haciendo piruetas, el envidiable estado vocal de Bruce y qué decir del jefe, Steve marcó el ritmo sin descanso y disparó su bajo constantemente al respetable.
Hay un momento de incertidumbre, ya que las luces no se encienden y pasan unos segundos interminables, en los que se llego a escuchar “¿te imaginas que hoy tocan una más?” pero no tuvimos esa suerte, al ritmo de Always Look On The Bright Side Of Lifede MONTY PYTHON, nos despedimos del estadio, esperando que vuelvan el año que viene con la segunda vuelta de esta espectacular gira.

TEXTO: Metalmaniac y Ziltoid.
FOTOS: Metalmaniac.









Kiss+Megadeth - Wizink Center. 08/07/18.

No podía dejar pasar la oportunidad de volver a ver a mi grupo favorito, por lo cual, tal y como acabaron su actuación en el Rock Fest, salí disparado para casa a intentar descansar unas horitas para ponerme en marcha hacia Madrid.
Yo soy el primero que reconozco que esto se esta acabando y que Paul es una sombra de lo que fue cantando, pero yo espero llegar a jubilarme con el ímpetu que posee él, que tiene edad para retirarse, cosa que tengo entendido pretenden hacer en un futuro bastante cercano.
La oferta del cartel era muy interesante, pero un problema de montaje retrasó más de 2 horas la apertura de las puertas del Wizink Center y la banda que tenía que abrir el concierto, THE BLACKMORDIA, no pudieron hacerlo y fueron MEGADETH lo encargados de calentar al personal.
Con únicamente 9 temas (el retraso afectó a todos, porque tenían programados 60 minutos de actuación y solo hicieron 50, sumando bis y despedida) y comenzando por Hangar 18, los de Mustaine no dan casi respiro, porque lo que habla Paul no lo hace Dave, que solo hizo pequeño saludo tras el cuarto tema My Last Words.



Acompañados de un buen sonido y con la pantalla que ocupaba toda la parte trasera del escenario, emitiendo imágenes en cada uno de los temas, ejecutaron un buen show en el que no faltaron sus éxitos Symphony Of Destuction y Peace Sells, tocando Holy Wars... The Punishment Due con la aparición de Vic Rattlehead (su mascota) en el escenario.
Una muy buena actuación que nos supo a poco.



Ha sido el concierto de KISS mas corto que he visto de todas las veces que he podido disfrutarlos, (a excepción de su actuación en Donington 88, cuando fueron Special Quest de IRON MAIDEN) porque 90 minutos son pocos para esta banda, lo que hizo que nos quedáramos un poco cojos de temas a comparación de los que sonaron la noche anterior.


Lo que si fue más convencional fue el guion escénico al casar más los momentos shock con los temas interpretados.
En esa ocasión después del "You Want The Best, You Got The Best, The Hottest Band In The World" y tras la caída del telón, aparece la banda a pie de stage y lo que desciende desde lo alto es la batería (primer cambio) para interpretar Deuce y reafirmarnos que sin faltar ningún artificio de los habituales en sus shows, es el escenario más simple que ha llevado la banda en años.


Llevan desde su reunión con maquillaje (22 años!!!) basando su listado de termas más en aquella primera época de los 70, que alguna aportación más no iría mal de otros exitazos, pero es que también nos gusta escuchar Shout It Out Loud, War Machine o Firehouse, momento en que Gene escupe su lengua de fuego.
Se agradece que dejen a Tommy cantar Shock Me incluyendo el solo con los disparos de cohetes, seguida de Say Yeah única concesión moderna al set, volviendo al redil con I Love It Loud, y entonces valoras que Gene sigue conservando un buen nivel de voz y que Paul está entonando algo mejor que la noche anterior, lo que demuestra en el sopresón de la gira, Flaming Youth.
A renglón seguido Calling Dr. Love, que no sonó en Can Zam, Lick It Up (la única de los 80), y entramos en el momento solo de Gene, con su gorgoteo de sangre y el vuelo hasta una plataforma en las alturas para ejecutar God Of Thunder.



Tras I Was Made For Loving You, Paul quiere acercarse al público y subido a una tirolina atraviesa el pabellón para posarse sobre una pequeña tarima para interpretar Love Gun y acto seguido, tras un pequeño solo, nos da la intro de Black Diamond, y aprovechando el principio del tema, regresa al escenario en el momento en que Eric empieza a cantar la que sería la canción que cerraría el set.
En un mínimo lapsus de tiempo (es que no lo hay), atacan lo bises con Detroit Rock City y fin de fiesta por todo lo alto con toneladas de confeti, fuegos y petardacos a ritmo de Rock And Roll All Nite, para deleite de todos.
La fiesta es fiesta y tiene un nombre: KISS!!!

TEXTO Y FOTOS: Ferkiss.

Rock Fest Barcelona 2018 - Parque de Cam Zam. Día 3.


Último día de festival, en el que más pronto empezaron las bandas, de ahí que no pudiéramos ver más que las dos últimas canciones de DESTRUCTION, el primer grupo del día, aunque a juzgar por la cantidad de gente que ya había concentrada, la impresión era que su actuación había sido muy buena.

DARK TRANQUILLITY nos ofreció un recital de death metal melódico.
Ya desde el principio con Encircled y Monochromatic Stains nos dimos cuenta que los suecos iban a ir a por todas.
Los temas iban desfilando haciendo las delicias de los allí reunidos, The Science of Noise, Final Resistance  y Athoma  sonaron muy potentes .
El remate final vino con los dos últimos temas, Lost to Apathy  y Misery's Crown  muy bien recibidas por el público.
En resumen, una gran actuación de un grupo que no estaría mal que pudieran repetir en el Rock Fest a una hora que les hiciera tener más presencia.

Bajo un sol de justicia, nos posicionamos par ver la actuación de THE DEAD DAISIES, a los que ya vimos con anterioridad como teloneros de KISS, la última vez que visitaron nuestro país, y nos dejaron con ganas de mas, ya que su Old School Rock nos llega directo al alma rockera que nos corroe.




Y no es para menos si tenemos en cuenta los miembros que componen la banda con Deen Castronobo a los parches, John Corabi a la voz, Marco Mendoza al bajo, y Doug Aldrich y David Lowy a las guitarras.




Durante diez cortes nos hacen bailar y disfrutar de una música elaborada y muy enérgica , empezando por Resurrected, RiseUpy Make Some Noise, dejando claro la calidad de cada uno de los componentes y juntos creando un sonido compacto y directo sin fisuras. 




Doug toca las seis cuerdas con un gusto y habilidad dignas de mención y Marco machaca su bajo con elegancia, junto con John interactuando con el público, nos quedamos con ganas de que Castronobo, impecable marcando el  ritmo, cante algún tema, aun así llegan a una conexión muy intensa que hace que su descarga se nos pase en un suspiro, esperamos verlos más a menudo.




Ellos mismos lo decían: " No sabemos qué hacemos aquí, pero aquí estamos", y la verdad es que MOJINOS ESCOZIOS  nos han hecho pasar un rato divertidísimo, porque además de lo bien que tocan y suenan, si a sus letras le sumas el desparpajo y el "chorreo" que tiene su frontman "El Sevilla", da por hecho que como mínimo no vas dejar de lucir la sonrisa durante el tiempo que estén en escena.

La hora del grupo se ha pasado volando con canciones como ¿Me Has Dicho Borracho?, Mi Jefe, Que Güeno Que Estoy, Las Niñas De La Saye o La Pastilla de Jabon.
¡Unos auténticos Craks!
PHIL CAMPBELL  AND THE BASTARD SONS serian los siguientes en pisar stage para presentarnos su nuevo disco y hacer un pequeño homenaje/recuerdo a la banda donde militó el señor Campbell casi toda su vida: MOTÖRHEAD.



Un set bien estructurado con temas propios como Big Mouth, Freak Show o High Rule  que, como es normal, tienen algún parecido a los Rock Out, Born To Raise Hell, Goin To Brasil o Ace Of Spades que sonaron en esta ocasión, siendo la familia Campbell, Phill y sus hijos Todd, Tyla y Dane los que llevan la parte instrumental y Neil Starr (ATTACK, ATTACK) el que lleva la voz cantante.
¡Buen sonido, buenos temas, buen show!







Tal vez una de las apuestas más arriesgadas de la organización del Rock Fest era traer una banda como Sôber, no por la banda en sí, ya que tiene un largo recorrido y una solvencia contrastada, sino por el formato en el que se presentaron.


Con toda una orquesta sinfónica detrás para dar vida a ese proyecto llamado "La sinfonía del Paradysso", un ambicioso homenaje a su más notable trabajo Paradysso.
El resultado es espectacular y la banda madrileña de los hermanos Escobedo, Manu Reyes y Antonio Bernardini salieron reforzados del festival gracias a un show impecable.
Todos los temas ganaron gracias a la aportación de la orquesta sin perder en absoluto toda la fuerza que se por si tenían.
Una apuesta ganadora sin ninguna duda.


Ha sido la actuación más contundente que he visto de STRYPER hasta el momento porque gozaron de un sonido espectacular, que aprovecharon para presentarnos su último disco God Damn Evil, del que a lo largo de la escasa hora que disponían sonaron The Valley, Sorry  y el tema que da título al mencionado disco, intercalando clásicos de la talla de Calling On You, Free, Soldiers Under Command  o To Hell With The Devil, demostrando la calidad de la que goza el grupo desde su fundación por los hermanos Sweet, Robert y Michael, su inseparable Oz Fox, y el nuevo bajista Perry Richardson, ex-FIREHOUSE, dejándonos a todos con muchas ganas de más y deseando que no tarden en regresar por nuestro país y poder disfrutar de uno de sus shows completo.







Había muchas ganas de ver a MEGADETH, y su actuación estuvo al nivel que se esperaba de ellos.
Hangar 18 y The Treath is Real fueron las elegidas para empezar seguidas de clásicos como The conjuring o Sweeting Bullets.
Pronto nos damos cuenta que, una vez más, la voz de David Mustaine está lejos de ser la que era, pero al público eso no pareció importarle mucho.
El resto del grupo es sin duda una garantía y así lo demostraron, David Ellefson al bajo, el gran Kiko Loureiro, conocido por su gran trabajo en Angra, y el belga Dirk Verbeuren, que colaboró con Devin Townsend entre otros a la batería.
El concierto avanzaba y Tornado of SoulsDystopia dieron paso a la conocida Symphony
of Destruction  donde el público ya estaba rendido a los trashers americanos.
Peace Sells y Holy Wars... The Punishment Due pusieron punto final al concierto donde el grupo demostró ser aún un referente del estilo que llevan defendiendo desde 1985.

SCORPIONS, para mí, han sido la decepción del festival. Al ver a Klaus Meine me he asustado.
Creo que el  botox no le permite cantar, además de ir ya justico de voz, lo que hace que cada dos canciones haya un tema instrumental o algo que frene su trabajo,  Mikkey Dee da la sensación de que va a medio gas, porque la diferencia de tocar los temas de MOTÖRHEAD a lo de ahora…  ¿Desde cuándo este hombre no toca una balada?.



Rudolf y Mathias siguen estando perfectos con sus guitarras y Pawell al bajo, pero ya no divierten como antes, y lo único relevante del show ha sido que han aprovechado que paraba Phil Campbell por el festival para que pudiera compartir escenario con su amigo Mikkey e interpretar  Overkill  mientras en las pantallas salía la imagen de nuestro añorado Lemmy Kilmister, seguido del solo de batería en que Mikkey se ha podido desfogar.



Se ha apañado un poco el asunto llegando al final con Blackout  y  Big City Nights  y en los bises con  Still Loving You  y  Rock You Like A Hurricane.
Lo dicho: Cuando anunciasteis que os retirabais, teníais que haberlo hecho.



Y llega el bombazo final con KISS en el comienzo de su gira mundial 2018 que abarca 4 conciertos en España y uno en Lisboa, igual es por la preparación del definitivo Farewell Tour que se comenta durara más de 2 años.



La aparición de la banda es descendiendo desde el techo tras la caída del telón con Deuce  y vemos que es un concierto especial porque el atrezo es más simple que en cualquier gira anterior, achacándolo al espacio que ofrecen los dos escenarios unidos del festival para que se sucedan las actuaciones, que no son pequeños para nada.



Sorpresa cuando en la tercera cae I Was Made For Loving You, y van sucediéndose éxitos como Love Gun, pero antes Tommy nos ha cantado Shock Me  incluyendo el solo con los disparos de los cohetes.



Lick It Up  y el resto de temas que canta Paul chirrían un poco porque no tiene buena voz y los sufre, y eso que Gene, Eric y Tommy lo tapan mucho en los estribillos y coros.
Gene sigue interpretando su papel en el show a la perfección: Escupe fuego en Firehouse,  hace su solo de bajo y escupe sangre para acto seguido salir volando hasta una plataforma  en el techo y cantarnos God Of Thunder  e interpreta muy correctamente todas las partes vocales que le pertenecen.



Y siguen las sorpresas con Flaming Youh  y  Say Yeah totalmente inesperadas o que la canción elegida para que Paul vuele con su tirolina por encima del público y acabe en una tarima en medio del mismo sea Psyco Circus  seguida de Rock And Roll All Nite  y las toneladas de confeti que lanzan.
Bises compuestos por  Cold Gin,  Detroit Rock City  y Black Diamond  cantada por Eric dan la sensación de haber vivido un concierto experimental  de KISS con lo firmes que son en las estructuras de sus shows.



Y esto es lo que ha dado de sí el Rock Fest 2018, del cual hemos tenido que sacrificar algunas bandas para poder  sobrevivir  a estas largas jornadas de metal, que ya ha confirmado la organización que el del 2019 durará 4 días.

TEXTO: Ferkiss, Metalmaniac y Ziltoid.
FOTOS: Ferkiss y Metalmaniac.