A falta de que ningún promotor español haya querido apostar por este pedazo de cartel, nos hemos desplazado a París para disfrutar a tope de tres bandas que gozan de un directo impresionante.
En el emblemático Bulevar de Clichy y perteneciente al histórico Moulin Rouge, se encuentra la sala La Machine, local de media capacidad en varios niveles, parecida a la Sala Upload de Barcelona, que dispone de un escenario amplio y un buen equipo de luz y sonido.
Las puertas se abren sobre las 18h y en 30 minutos ya tenemos a los alemanes FORMOSA sobre el escenario, del que disfrutarán durante 8 temas qué es lo que da su media hora de actuación.
En formato cuarteto, Nick Bird deja su papel como bajista para encargarse solo de la parte vocal, completando el trío fundador de la criatura París Jay tras los parches y Nick Beer como guitarrista, que comienzan al espectáculo con Living On A Blade y Burning Desire que nos da la sensación de estar escuchando a los Mötley Crüe del Too Fast For Love, lo cual hace qué dejen huella en el poco público que hay en este momento en la sala
Fuck Up Your Liver, Sold My Soul, la enérgica Horns Up dan paso al momento de la aparición del cantante con un abrigo de plumas de cuervo para interpretar el medio tiempo Melinda, tras lo que finalizan su tiempo con Manic Lover y Bad Boys dejando al público muy satisfecho y nosotros deseando que se puedan presentar en nuestra ciudad en alguna ocasión.
Ellos son la principal causa de este viaje porque solo han actuado una vez en Barcelona, y aunque tienen anunciada actuación en la próxima edición del Leyendas del Rock, está era la manera de ver un espectáculo de hora y cuarto lo más cerca de casa, y es que la banda del gran Nils Molin, (vocalista también en AMARANTHE), DYNAZTY, es de las que te marcan desde el primer momento en que los ves.
Los suecos tienen una calidad compositiva excelente y un sonido en directo que no tiene nada que envidiar a las grandes bandas de metal, ya que con 16 años de historia y 8 álbumes de estudio han forjado un recorrido muy sólido, y con esta gira aprovechan y basan su set en sus dos últimos trabajos, The Dark Delight y Final Advent, que como le ha pasado a la mayoría de las bandas se han encontrado con dos trabajos por presentar tras el parón forzado de la pandemia.
El primer corte que suena a las 19.30 es Power Of Will seguido por Firesign y Natural Born Killer casi sin respirar, y aunque el sonido es limpio, notamos que le falta un poquito más de volumen para que la banda suene aún con más garra.
Love Magnusson y Mikael Lavér son un dúo de guitarras magnífico, repartiéndose el papel de solista en los diferentes temas, con una base rítmica de nivel compuesta por Jonathan Olsson al bajo y Georg Härnsten Egg a la batería que dan un peso al conjunto extraordinario. Del señor Molin no creo que haga falta decir nada si es que se ha tenido en alguna ocasión la oportunidad de verlo trabajar... Uno de los mejores vocalistas del Metal actuales sin ninguna duda, como confirman Paradise Of The Architect, The Grey y Advent.
Para que Nils descanse su garganta la banda toca en modo instrumental el cover de DEEP PURPLE, Highway Star, tras la que regresa él solo para empezar a interpretar la primera estrofa de la preciosa Yours, a la que se une el resto para completar el corte y seguir con In The Arms Of A Devil, que da paso al solo de batería de Egg.
El temazo Waterfall crea un momento de confusión cuando su batería cambia el ritmo lo que hace parar el tema, siendo un momento sorpresa para el bajista que recibe la felicitación de su grupo y del público porque es su cumpleaños, tras lo que vuelven a ejecutar el tema entero para ir enfilando el fin del set con Presence Of Mind.
Muy escaso es el tiempo que separa su nueva aparición en escena para atacar los bises con The Human Paradox y una algo alargada Heartless Madness que ya se ha convertido en un auténtico himno para los fans, dando por terminado su espectáculo, el cual nos ha sabido a poquísimo, y rezando porque alguien sea lo suficientemente valiente como para pillarlos para una gira por nuestro país.
Estamos viendo bastantes giras de grupos que comparten cabeza de cartel como en el caso que nos ocupa al disponer del mismo tiempo de escenario tanto DYNAZTY como KISSIN´ DYNAMITE que serán los que cierren la noche con su potente hard & heavy; en esta ocasión los alemanes nos presentan Not The End Of The Road que es su último trabajo, y empiezan su actuación con el tema perteneciente a este No One Dies A Virgin con una banda pletórica y enérgica, encabezada por su gran frontman y vocalista Hannes Braun que no deja en ningún momento de animar e incitar a participar a un público que ya casi llena la sala.
El resto de la banda compuesta por Andi Schnitzer baterista y Steffen Haile bajo, como base rítmica, y Ande Braun que forma dúo con Jim Müller como guitarristas trasmiten una imagen de conjunto compacto y engrasado como demuestran I´ve Got The Fire, Sex Is War y Love Me, Hate Me que son los primeros temas que forman el repaso por sus éxitos, tras lo que suena Only The Dead como nuevo tema, que da paso al corte que dio título a su recopilatorio editado en 2021 Living In The Fastlane.
Otro nuevo tema es What Goes Up tras el cual colocan un trono en el escenario para que ataviado con capa y cetro Hannes se acomode en él tras una divertida aparición en el escenario e incitar al público a gritar y animar, todo ello para interpretar I Will Be King, seguida por DNA, la fantástica Six Feet Under y You're Not Alone nos llevan a Not The End Of The Road que es el último corte que compone el set para dar paso a esos merecidos minutos de descanso para dar por finalizada la totalidad de su actuación con Flying Colours y que pone el punto final a este magnífico concierto que aunque nos ha hecho regresar a la preciosa ciudad de París ya nos hubiera haber podido disfrutarlo en casa.
TEXTO Y FOTOS: Ferkiss.
