Fuimos hasta la sala La Nau, con la promesa de disfrutar de una noche de temas de WINGER, DOKKEN y WHITESNAKE, a cargo de uno de los actuales guitarristas de este último, Reb Beach, y aunque el bolo fue excelente, salí un poco decepcionado, al ver que el 97 % de los temas fueron de WHITESNAKE, no me malinterpretéis, me gustó y mucho, pero no puedes publicitarte de una manera, y hacer la otra, aun así, fue un buen bolo, quedándose ahí por la elección errónea de los temas.
Al menos, tocar cortes menos conocidos, y en los que Reb Beach ya militaba en la serpiente blanca, y unos cuantos temas más de WINGER y DOKKEN, hubiera sido un bolo redondo, pero, nunca llueve a gusto de todos.
A las 19:30 abren las puertas, y tras un retraso deliberado para ver si acudía más público, martes laboral, empieza el espectáculo, con un poco más de media sala.
Reb Beach And The Bad Boys, banda formada por Khaled Abbas a la guitarra, Enrico Varisco al teclado, Paolo Caridi a los parches y Michele Luppi al bajo y voz, salen muy sonrientes y empiezan con Bad Boys de WHITESNAKE, y sin descanso Fool For Your Loving, ganándose la complicidad del público y que ya no bajará en toda la noche.
Buena ovación para In My Dreams de DOKKEN, muy bien interpretada por la banda, a destacar la voz de Michele que ya había calentado y empezó a brillar, solo de guitarra a cargo de Reb, como no podía ser de otra manera, perfecto.
Temazo para WINGER con Headed For A Heartbreak y para In MY Dreams de nuevo de DOKKEN, y empieza el grueso del concierto con Love Ain't No Strangers, un magnificó Crying In The Rain, seguido de un pequeño solo de batería a cargo de la bestia parda de Paolo, para levantar el pie del acelerador con la híper balada Is This Love.
Momento de lucimiento de Reb Beach con un solo espectacular al que se le añade el resto de la banda y hacer un tema instrumental estupendo, con anécdota, al detener el tema Reb para decirle al técnico de luces que encienda los focos hacia el escenario que no se ve nada, un mal que esta sala arrastra desde hace tiempo, retomando desde el solo y acabando el tema sin más contratiempos.
Slide It In quizás una de las más coreados, con su ritmillo vacilón y seguida de Slow And Easy, para deleite de algunos, un pequeño solo de teclado que nos remontó a esos tiempos en que las bandas no lo llevaban pregrabado, espectacular.
Ultima concesión a WINGER con Miles Away y Madeleine, con ejecución casi perfecta y muy celebradas.
Momento Burn para encarar el final con Give All Your Love, la cantada a pleno pulmón Here I Go Again, y una magnifica Still Of The NIght, en las que toda la banda se lució de lo lindo.
En Resumen, un bolo estupendo, que podría haber sido mucho mejor, pero que nos dejó a todos con un sabor a revival ochentero estupendo.
TEXTO Y FOTOS: Metalmaniac.
